¡HARPO HABLA!

¡Harpo habla! es el título de la autobiografía de Harpo Marx, una verdadera joya muy recomendable para todos los amantes del cine, los fans de los hermanos Marx y para todos aquellos que disfruten con historias increibles y divertidas.

Yo siempre pensé que Harpo era mudo, pero nada de eso, lo que ocurre es que en una obra teatral se le ocurrió improvisar y, posteriormente, tanto su tío como las críticas coincidieron en que estaba mejor calladito, y que al hablar lo había estropeado, así que dejó de hablar en el teatro o en el cine y ha pasado a la historia con su peluca naranja, su gabardina de cuyos bolsillos salían todo tipo de cosas, la bocina y el arpa. Precisamente de su afición por este instrumento musical le viene el nombre artístico, ya que él se llamaba Adolph Marx.
Harpo no llegó a terminar el segundo grado en la escuela pero eso no le impidió codearse con personalidades de la cultura y el mundo artístico y formó parte de la mesa redonda de Algolquin donde se reunían los autores, editores, críticos y artistas más brillantes. Por ejemplo, uno de sus grandes amigos era Alexander Wolcott, un importate crítico de Broadway.

El libro es una gozada, ameno, divertido, casi increible. Narra su infancia difícil, las personas con las que se relacionó y un montón de anécdotas, a cuál más sorprendente e increíble.

Si lo leéis no os defraudará pues es interesante y muy entretenido, está escrito de forma ágil y clara y seguro que os hará pasar tan buen rato como a mí.