Sin fin

Hace unos días fui a los cines Renoir Princesa de la Plaza de los Cubos (Madrid) a ver la película Sin fin (2018) dirigida por los hermanos Esteban Alenda. La película me encantó, pero lo mejor de todo, o lo que hizo que la sesión fuera redonda, muy especial, fue poder hablar al final de la peli con los directores y con el actor protagonista, Javier Rey.

Charlamos con ellos y nos hablaron de cómo surgió la idea, cómo fue el rodaje, anécdotas...sin duda un lujazo poder compartir con ellos ese rato y comprender mejor los entresijos de la película.

Javier Rey contó una divertida anécdota, en la escena en la que se besan en la ducha, de repente se dieron cuenta que los pelos de la barba postiza se le habían pegado a ella en la cara, y tuvieron que hacer piruetas con la cámara para que no se notara.

La idea de la película surgió hace años, y le precedió un corto con los mismos artistas (Not The end). Hay que decir que contiene elementos de ciencia ficción, y viajes en el tiempo, pero son más bien la excusa para contar una historia de amor. Una historia con altibajos porque los protagonistas no son gente cualquiera, tienen sus peculiaridades. María (María León) es una joven a la que vemos eufórica y llena de vida e ilusiones en algunos momentos, o hundida en la depresión en otros, con ideación suicida, autolesiones, lo que nos hace pensar que María puede tener un trastorno bipolar. Javier (Javier Rey), se comporta de manera peculiar. Su mascota es una rata que lleva en su mochila, recoge tubos catódicos para sus experimentos, observa el mundo, a la gente, desde la barrera, desde lejos, sin implicarse, hasta que conoce a María, la joven y alegre camarera, que quiere ser actriz y que le pone un nuevo nombre: Trigo. 

Javier, o Trigo, es inteligente, siempre le acompaña su cuaderno de bitácora, pero le cuesta relacionarse con los demás, implicarse emocionalmente. ¿Es, quizás, un síndrome de Asperger? ¿O sólo es un chico tímido y reservado que no sabe relacionarse? ¿Presenta un trastorno de la personalidad? Creo que podría ser una cuestión a analizar.

La película, ópera prima de los hermanos Alenda, nos cuenta la historia de amor entre María y Javier y nos hace viajar por Cádiz, Málaga y Madrid (el autobús me trajo recuerdos de otros tiempos) y también nos hace viajar en el tiempo en un intento de modificar la realidad cuando esa realidad no es la que nos gusta.

Os dejo un enlace en el que se incluye a los hermanos Alenda dentro de los directores españoles más prometedores: Directores prometedores

Junto a los protagonistas, que bordan sus papeles, podemos ver también a Juan Carlos Sánchez, Mari Paz Sayago, y Paco Ochoa completando el reparto.

A continuación os dejo un enlace con una crítica de la Revista Fotogramas: Crítica

Lo que puedo decir es que me encantó la película, me hizo pensar en el amor, en el paso del tiempo, en lo que pudo haber sido y no fue, y en esa ilusión de poder cambiar algo del pasado...¿Y si esto lo hubiera hecho así o asá? Así que os recomiendo esta película, este viaje en el tiempo, este viaje hacia el amor, las relaciones personales. Y aprovecho para felicitar a los directores y a Javier Rey por el regalo que nos hicieron, por compartir con el público su tiempo, sus ideas, su talento, sus vivencias...

Y una gran noticia, es que Sin Fin está en la carrera de los Goya, nominada en la categoría de mejor dirección novel:


Sin fin nominada a los Goya

En esta categoría compiten con  Andrea Jaurrieta por Ana de día, Arantxa Echevarría por Carmen y Lola y Celia Rico por Viaje al cuarto de una madre.

Desde aquí les deseamos mucho éxito y ojalá consigan este premio y muchos más.